VICTORIA: Parezco ansiedad desde hace mucho, y con está situación me siento más nerviosa que nunca. Tengo miedo por el futuro de mi esposo y el mío, no sé si cuando esto acabe, llegué una crisis tremenda, que provoque que nos despidan del trabajo. Pienso en eso, y me empiezo a agobiar, y siento una opresión muy fuerte en el pecho. Tengo mucho miedo a que perdamos el trabajo, porque aunque tenemos carreras y un buen CV, cuando vino la crisis del 2008, nos quedamos sin trabajo y lo pasamos muy mal, ya que tardamos bastante tiempo en encontrar un nuevo empleo. Temo que esto vuelva a pasar. Cuando me pasó eso, tuve una depresión profunda y lo pasé muy mal. También sufro mucho por mis padres, que son mayores y están delicados de salud, y están solos, y no puedo verlos. No quiero hundirme, pero soy una persona que necesita tenerlo todo controlarlo, porque me siento segura, y esta situación me desborda. No obstante, intento hacer caso de los consejos que dais, tengo una rutina diaria, además estoy estudiando a distancia, aunque me cuesta mucho concentrarme. Me podíais dar algún consejo? Muchas gracias por esta gran labor.

Victoria, gracias a ti por la confianza y por compartir. Entiendo tu preocupación y temor  por lo que pueda suceder en el futuro y más  aún si está  basado en una  experiencia vivida en el pasado, pero ahora mismo , anticipar situaciones que no han ocurrido ( y puede que no ocurran) te está generando ansiedad. Debemos aceptar aunque nos cueste, que vivimos tiempos inciertos, como también el hecho de que hay cosas que no dependen de nosotros . No sentir que tenemos el control de la situación  nos hace sentir vulnerables y esa sensación no  nos gusta . Debemos focalizar nuestra energía en aquellas cosas que sí podemos hacer, y hasta que esta situación  no pase, que pasará, podemos aprender mucho de nosotros mismos. Vive el aquí y ahora,  conecta con tus emociones , sin miedo. Comenta con tu marido que cosas habéis hecho cada uno de vosotros que os ha ido llevando a encontrar un nuevo trabajo y a mejorar vuestro estado de ánimo. Sigue con tu rutina habitual dejando espacio a actividades que te distraigan y  te hagan desconectar de tu malestar. Piensa que no ver  a tus padres de forma presencial  no significa que no puedas hablar y saber de ellos. Existen muchas manera de cuidar y de estar. Llamarles, conversar, expresarles tu amor por ellos, les ayudará y a ti también,  a sentirte cerca  y a sobrellevar mejor este momento. Practicar alguna técnica de relajación, de yoga, un curso de Mindfulness ( puedes encontrarlo online) podrá ayudarte a reducir la ansiedad, y recuperar poco a poco la concentración en tus estudios, donde estás poniendo una base para tu  futuro y eso dice mucho de tu capacidad de reinventarte.