P.- CARLA: Buenos días. Al principio de esta situación, lo gestionaba correctamente, pero llevo una semana que estoy fatal. He ido al médico y me ha mandado Diazepam (5mg) me lo tomo por la noche, estoy mejor, pero aún y así, estoy llorando cada dos por tres.
Eso hace que no tenga tanta ansiedad, ya que antes tenía mucho dolor en el pecho, sensación de ahogo por no dejar pasar el aire, ando con dolor de cabeza (a veces) y también descomposición.
Entiendo que todo debe de ser por la ansiedad. Trabajo desde casa, ya esta es la quinta semana, vivo con mis padres y soy la que se encarga de salir a comprar, lo hago una vez a la semana, y la verdad que tampoco lo paso bien cuando lo he de hacer. Tengo miedo a coger el virus, aunque tomo precauciones voy con mascarillas, guantes me pongo el gel, pero siempre pienso en ello.
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Evito ver la tele (noticias), incluso me he quitado las redes sociales, como Facebook, del móvil porque lo paso mal leyendo cómo va todo. Nunca había tenido una crisis de ansiedad, y puede que también esté así, por no saberlo gestionar. Gracias por su ayuda
R.- Hola Carla, parece que poco a poco han ido disminuyendo tus fuerzas para afrontar esta situación seguramente a causa de lo largo que lo estamos sintiendo y de la incertidumbre respecto a cómo va a ir evolucionando. Tener un ataque de ansiedad es un indicador del esfuerzo que has estado haciendo. Cuando uno no sabe que es un ataque lo vive con mucho miedo.
Este miedo se queda en nuestra mente para avisarnos de que no queremos que nos vuelva a suceder porque es desagradable. La medicación te va a ayudar a sentir tu cuerpo un poco más relajado y a volver a tener confianza en él y en tu salud. Los síntomas que comentas van a ir cediendo poco a poco y van a mejorar cuando vayas viendo el final de este túnel.
Seguramente el trabajo desde casa aporta cierta tensión y malestar. Eres la que cuida y abastece a tus padres saliendo de forma heroica a comprar. Te proteges muy bien y tienes conciencia de que es lo que debes y no debes hacer para mantenerte sana. Date cuenta de cuantas cosas estas haciendo bien y concédete un poco de auto-compasión por los retos que estás viviendo, los esfuerzos que estás haciendo y los miedos que estás afrontando.
Restringir el acceso a las noticias es también una buena decisión para estar solo al corriente de los importante y evitar sobrecargarte de imágenes y temas que pueden asustarte más. Te aconsejo que utilices las redes sociales para contactar con amigos, conocidos o buscar temas que sean positivos y constructivos. Distráete con ellos y empieza a buscar nuevos incentivos tanto para tu tiempo libre en el confinamiento, como para después del mismo.
Siéntete orgullosa de poder estar atendiendo a tus padres y colaborar en su salud y bienestar. Busca momentos con ellos para compartir algo agradable como ver una película o jugar juntos o
revisar anécdotas e historias de la familia. Muchos ánimos, cada día queda un poco menos para una nueva etapa.